Al grito de “Somos
los marceros, ¿Cantamos o rezamos?”, ataviados con un pañuelo rojo al
cuello y su vara de avellano, los alumnos
de 1º de Primaria llamaron a la puerta del Aula de Música en donde se
encontraban sus padres y familiares, para cantarles las Marzas y dar la
bienvenida a la Primavera.
Con la debida licencia, siguiendo la tradición de los
pueblos de Cantabria, no olvidaron despedirse “hasta el año venidero”, ni tampoco de pedir “marzas”, galletas en este caso, que disfrutarán en los recreos.
¡Marzo
florido, seas bienvenido!
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